¿Qué es el Herpes Labial? El herpes labial, también conocido como herpes febril, es una infección viral común causada principalmente por el virus del herpes simple tipo 1 (VHS-1). Este virus provoca la aparición de pequeñas ampollas llenas de líquido en los labios o alrededor de ellos. Estas ampollas suelen agruparse formando manchas y, tras […]
El herpes labial, también conocido como herpes febril, es una infección viral común causada principalmente por el virus del herpes simple tipo 1 (VHS-1). Este virus provoca la aparición de pequeñas ampollas llenas de líquido en los labios o alrededor de ellos. Estas ampollas suelen agruparse formando manchas y, tras romperse, forman una costra que puede durar varios días. Generalmente, el herpes labial se cura en 2 o 3 semanas sin dejar cicatrices. Puede contagiarse de una persona a otra mediante contacto cercano, como besos, y también puede transmitirse a través del sexo oral. No hay cura para el herpes labial, pero los tratamientos pueden ayudar a controlar los brotes.
Síntomas del Herpes Labial
Hormigueo y Picazón:
Antes de que aparezcan las ampollas, muchas personas sienten una sensación de hormigueo, ardor o picazón alrededor de los labios. Esta etapa inicial puede durar aproximadamente un día antes de que aparezca un punto pequeño, duro y doloroso, y se formen las ampollas.
Ampollas:
Posteriormente, se forman pequeñas ampollas llenas de líquido en los labios, a lo largo de su borde, alrededor de la nariz o las mejillas, e incluso dentro de la boca. Estas ampollas pueden fusionarse, creando llagas más grandes.
Secreción y Costras:
Las ampollas pueden romperse, dejando llagas abiertas poco profundas que presentan secreción y forman una costra. La costra protege la herida mientras esta sana, lo cual puede tardar varios días.
Síntomas del Primer Brote:
El primer brote de herpes labial suele ser más severo y puede incluir síntomas adicionales como fiebre, dolor en las encías, dolor de garganta, dolor de cabeza, dolores musculares y ganglios linfáticos inflamados. Estos síntomas pueden durar de 2 a 3 semanas.
Reapariciones:
Los brotes recurrentes suelen aparecer en el mismo lugar y tienden a ser menos graves y de menor duración en comparación con el primer brote. Los factores desencadenantes comunes incluyen estrés, fiebre, exposición al sol, y cambios hormonales.
En los niños menores de 5 años, el herpes labial puede presentarse dentro de la boca, a menudo siendo confundido con aftas, que no son causadas por el virus del herpes simple.
Tratamiento del Herpes Labial
Aunque no hay cura para el herpes labial, los tratamientos pueden ayudar a controlar los brotes y aliviar los síntomas.
Medicamentos Antivirales:
Aciclovir, Famciclovir y Valaciclovir: Estos medicamentos se utilizan para reducir la duración y severidad del brote. Funcionan inhibiendo la replicación del virus y son más efectivos si se toman al primer signo de un brote. Estos fármacos también pueden reducir la frecuencia y gravedad de futuros brotes.
Cremas Antivirales:
Las cremas antivirales se aplican directamente sobre las ampollas y pueden acelerar la curación. Deben aplicarse varias veces al día, siguiendo las indicaciones del producto.
Remedios Caseros y Cuidados Adicionales:
Aplicar hielo puede reducir la inflamación y el dolor.
Mantener la zona afectada hidratada y practicar buena higiene oral es crucial.
Utilizar enjuagues bucales antibacterianos y cambiar el cepillo de dientes después de un brote puede prevenir la reinfección.
Cuándo Consultar a un Médico
Es recomendable consultar con un profesional de la salud si:
Tienes un sistema inmunitario debilitado.
El herpes labial no se cura en dos semanas.
Los síntomas son graves o dolorosos.
El herpes labial reaparece frecuentemente.
Sientes dolor o una sensación de arenilla en los ojos.
Causas del Herpes Labial
El herpes labial es causado por ciertas cepas del virus del herpes simple. El virus del herpes simple tipo 1 (VHS-1) es la causa principal del herpes labial, aunque el tipo 2 (VHS-2), que generalmente causa herpes genital, también puede provocar herpes labial. El virus se transmite mediante contacto cercano, como besos, sexo oral, o al compartir utensilios de comer, cuchillas de afeitar y toallas.
El herpes labial es más contagioso cuando las ampollas están presentes y presentan secreción. Sin embargo, el virus puede transmitirse incluso en ausencia de ampollas visibles. Muchas personas portadoras del virus nunca presentan síntomas.
Una vez que has tenido herpes labial, el virus permanece inactivo en las células nerviosas de la piel. El virus puede reactivarse y causar brotes recurrentes debido a factores desencadenantes como infecciones virales, fiebre, cambios hormonales, estrés, cansancio, exposición al sol o al viento, y cambios en el sistema inmunitario.
Prevención
Para prevenir la transmisión del herpes labial a otras personas:
Evita el contacto cercano: No beses ni tengas contacto piel a piel con personas mientras tengas ampollas.
No compartas artículos personales: No compartas cubiertos, toallas, bálsamos labiales u otros artículos personales.
Mantén tus manos limpias: Lávate las manos con frecuencia y evita tocar las ampollas, especialmente antes de tocar a otras personas, en particular a bebés.
Para quienes tienen brotes frecuentes o están en riesgo de complicaciones, los médicos pueden recetar medicamentos antivirales de uso regular. Si la luz del sol desencadena los brotes, usa protector solar en los labios y considera un medicamento antiviral antes de exponerte al sol.
Implementar estas medidas puede ayudar a manejar y reducir la incidencia del herpes labial, mejorando la calidad de vida de quienes lo padecen.
Dr Andrés Rubio
Odontólogo
Con una sólida formación en odontología general y especialización en estética dental y prótesis sobre implantes, el Dr. Andrés Rubio Palomino brinda un cuidado dental integral y estético en Clínicas Cleardent. Desde 2019, destaca por su enfoque en la mejora continua y su dedicación al aprendizaje, ofreciendo tratamientos que realzan la sonrisa de sus pacientes. Con un estilo de trabajo cercano y responsable, el Dr. Rubio acompaña a cada paciente desde la consulta inicial hasta el final de su tratamiento, asegurando una experiencia de calidad y confianza.